En el Rig-Veda, la diosa Aditi es conocida por ser la responsable directa del cielo y la madre de los dioses. Un ente de cuya matriz cósmica nacerían todos los astros conocidos y desconocidos.
La primera aparición escrita que encontramos de Aditi es en el Rig-Veda, como ya hemos mencionado. Hay que mencionar que esta fuente se compuso aproximadamente 1.700 años antes de Cristo.
Se le solía invocar como dispensadora de bienestar para los niños, así como para el ganado. A demás estaría estrechamente relacionada con el perdón de los pecados.
Ella puede ser vista como una forma femenina de Brahma, el dios hindú de la creación, y se relacionaría también con la sustancia primordial, Mulaprakriti, en el Vedanta.
Por otro lado, muchos la considerarán como la mujer y esposa del sabio Kashyap, que daría a luz a los adityas como Indra, Surya y Vamana. Estos adityas serían dioses benéficos, que actuarían como protectores de todos los seres de la tierra. Serían providentes y protectores además con el mundo de los espíritus. Serían totalmente fieles a la ley eterna.
Cabe destacar que sería también la encargada de dispensar todos los alimentos necesarios a sus creaciones, hijos o como queramos llamarlos, para que pudieran sobrevivir sin problema. Era como una Gran Diosa Madre, reconocida por el Rig-Veda como la única diosa femenina de gran importancia.
A demás existe la creencia de que en los últimos días, los seres parten para volver a unirse a ella, de donde salieron una vez. Quizá por este motivo, la diosa esté tan relacionada con el perdón pues al ser la última compañía en este largo viaje de la vida es la única capaz de otorgar el perdón por los errores cometidos en ella.